El test de Dexeus es un sistema de puntuación para evaluar, mediante el cardiotocograma basal prenatal, la reserva respiratoria fetoplacentaria. J. M. Carrera propuso este nombre el 1977 por un test que se creó en el Instituto Dexeus y que se dio a conocer principalmente a través de la publicación a la revista Progresos de Obstetricia y Ginecología en 1979, tras un amplio trabajo titulado Evaluación del cardiotocograma anteparto mediante el test de Dexeus. Según el Dr. Carrera en 1977, basados en estudios estadísticos previos, diseñaron un score para la evaluación de la CTGB, que en honor al centro de trabajo se denominó test de Dexeus.
Este trabajo tenía en cuenta, sobre todo, los resultados de un trabajo anterior (1977) sobre cinética fetal en que se trabajaba ya con este test. Los autores, después de argumentar las posibilidades de la cardiotocografia prenatal en el diagnóstico de la reserva respiratoria fetoplacentària, revisaban los diversos sistemas de evaluación de los registros y analizaban el valor de algunas clasificaciones y índices numéricos.
Esto los conducía al análisis del test de Dexeus «Creemos que el mismo reúne todas las ventajas de los anteriores y aporta la novedad de tener en cuenta la cantidad y características de los movimientos fetales, así como sus diversas repercusiones sobre la FCF», haciendo un estudio a fondo de las bases de su diseño, de los parámetros que lo forman y del sistema de puntuación.
Este trabajo se completaba con la evaluación del valor pronóstico prenatal del test mediante el estudio de 1.058 registros de embarazadas, normales y de riesgo elevado, en que se comparaba los resultados del test con la mortalidad perinatal, la incidencia de sufrimiento fetal durante el parto y el número de depresiones neonatales.
Los autores llegaban a la conclusión que el test era muy útil en la práctica tanto para clasificar los registros como para efectuar una predicción de la evolución de la gestación, lo cual permitía orientar el clínico hacia una conducta correcta.
Los autores aseguraban que «El test de Dexeus, diseñado miedo nosotros y que se apoya especialmente en la cinética fetal y la reactividad de la FCF, se ha mostrado muy útil en la práctica, tanto para clasificar los registros como para efectuar un pronóstico de la evolución de la gestación y orientar al clínico hacia una conducta correcta». Además, la utilización de este test facilitaba el establecimiento de correlaciones con las pruebas de sobrecarga, como por ejemplo el test de oxitocina o la prueba de esfuerzo «Gracias a una mejor comprensión de la posibilidad del CTGB, ha sido posible reducir en las gestaciones de riesgo elevado el número de pruebas de sobrecarga oxitócica necesarias para determinar el grado de salud fetal».
El test de Dexeus se basa fundamentalmente en la cinética fetal y en la reactividad de la frecuencia cardíaca fetal. Los cinco parámetros que contempla el test, los valores de los cuales pueden ser 0, 1 o 2, son:
- Línea de base de la frecuencia cardíaca fetal
- Fluctuación de la línea de base
- Cinética fetal
- Reactividad de la frecuencia cardíaca fetal a los movimientos fetales.
- Reactividad de la frecuencia cardíaca fetal a las contracciones espontáneas.
Atendiendo a las puntuaciones obtenidas en este test, los cardiotocogrames basales se clasifican en normales (puntuación del test 9 o 10), prepatológicos (puntuación igual a 7 o 8) o patológicos (puntuación inferior a 8).
Este test, que fue utilizado desde entonces tanto al Instituto Dexeus como otras clínicas y hospitales, se sigue empleando como una herramienta útil dentro del establecimiento del perfil funcional en el pronóstico fetal. «Existen múltiples criterios y clasificaciones para valorar el test basal, basados todos ellos en la reactividad fetal y diferenciados entre sí en los parámetros que definen el feto reactivo, en función del número, amplitud y duración de las aceleraciones transitorias de la FCF».